El embarazo es un periodo especial en la vida de la mujer en el que su organismo sufre múltiples cambios fisiológicos para que el feto tenga las condiciones óptimas para su crecimiento y desarrollo.
Fuente: PubMed
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Entre ellos destacan las modificaciones en la composición del microbioma que se producen entre el primer y tercer trimestre del embarazo.
Se produce un aumento de Akkermansia, Bifidobacterium y Firmicutes, que se han asociado a un aumento de la necesidad de almacenamiento de energía. El crecimiento de los niveles de Proteobacteria y Actinobacteria tiene un efecto protector tanto en la madre como en el feto a través de mecanismos proinflamatorios.
El objetivo del estudio es revisar las investigaciones sobre la relación entre el microbioma intestinal de la madre y las patologías gestacionales.
Los cambios en el microbioma intestinal materno es probablemente uno de los mecanismos que se produce en diversas enfermedades del embarazo como la preeclampsia, la restricción del crecimiento fetal, la diabetes mellitus gestacional, la ganancia excesiva de peso gestacional y el parto prematuro.
Por este motivo, parece vital prestar atención a determinadas intervenciones que puedan beneficiar a las pacientes afectadas tanto a corto plazo, previniendo complicaciones durante el embarazo, como a largo plazo, ya que uno de los mecanismos que intervienen en diversas enfermedades gestacionales es la disbiosis de la flora intestinal materna.
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