Un hombre de Florida de 71 años fue sentenciado a 202 años de prisión por vender tratamientos falsos con células madre en varios estados.
Jimmy Lee Taylor fue declarado culpable de 44 cargos de abuso de ancianos y 23 cargos de ejercer la medicina sin licencia en un tribunal de Georgia.
Taylor se hizo pasar por médico ante sus clientes; aparentemente era un quiropráctico. Más tarde, una búsqueda en su casa mostró que Taylor tenía drogas y suministros médicos que probablemente provenían de México.
“Si bien hemos visto antes a personas de clínicas de células madre haciéndose pasar por médicos, hasta donde yo sé, todos ellos escaparon de consecuencias importantes. Al igual que algunos de los otros, este es un caso preocupante, pero parece aún peor en algunos aspectos”, comentó el bloguero de células madre, el profesor Paul Knoepfler .
“Las condenas por abuso de ancianos son notables. Muchas clínicas y comercializadores de células madre se enfocan en las personas mayores como futuros clientes potenciales. Cuando asistí a un seminario infomercial de células madre en persona hace años, la mayoría de la audiencia parecía ser mayor y/o jubilada. Una pena de prisión de 202 años es notable.
¿Disuadirá a otros de vender aceite de serpiente?”
Fuente: BioEdge
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