Así las cosas, la Atención Primaria en Salud seguirá siendo una ley muerta enterrada en el Cementerio Nacional de leyes, que es Colombia.
Bogotá 18 de enero 2024
Señores (as):
GUILLERMO ALFONSO JARAMILLO – Ministro de Salud y Protección Social.
EDILMA SUÁREZ – Desarrollo del Talento Humano, Ministerio de Salud y Protección Social.
JESUS ANTONIO ACEVEDO SOLANO – Alcalde municipal de Zapatoca.
EDUARD ANTONIO PRADA – Secretario de Salud del Municipio de Zapatoca.
OMER CASTELLANOS CHALELA – Gerente del hospital del Municipio de Zapatoca.
EDWIN ANTONIO PRADA RAMÍREZ – Secretario de Salud Departamento de Santander.
ASUNTO: INTIMIDACIÓN, PÁNICO Y AGRESIÓN FÍSICA A LA MISÍON MÉDICA EN ZAPATOCA SANTANDER.
Apreciados funcionarios, respetuoso, cordial y atento saludo,
Los médicos que actualmente cumplen su Servicio Social Obligatorio en la IPS Gestionar Bienestar – Hospital Zapatoca del municipio de Zapatoca, han recibido amenazas a través de voces y palabras fuertemente intimidatorias en redes sociales contra su integridad física, emocional y vocacional, exponiéndolos a un gravísimo riesgo, a ellos y a la población a su entero cuidado, hasta el extremo de que, efectivamente, una médica fue agredida y herida recientemente, al parecer, por un familiar de un usuario atendido en dicha institución.
Esta situación, de facto, de terror, los tiene entre la espada y la pared: exponer su vida vs. renunciar ipso facto, so pena de asumir todas sus adversas consecuencias.
Este hecho, gravísimo, que ponemos a su consideración y para su análisis crítico, ya ha sido puesto en conocimiento de algunos de ustedes, y de la Fiscalía, y sabemos que se ha comenzado a tomar medidas para su debida protección, que confiamos, sean las más adecuadas.
Sin embargo, es nuestro deber pronunciarnos sobre lo acontecido y señalar que:
1. Es muy preocupante que esta agresión sea muy reiterativa y se esté volviendo costumbre nacional, cosa, a todas luces, inadmisible.
2. La protección de la Misión Médica es fundamental en todos los servicios de salud en todo el territorio colombiano, pues lo que está en juego, es también, el orden constitucional y la salud de la población colombiana.
3. Como mandato internacional, las medidas apropiadas, a fin de proteger la salud física y mental del personal sanitario, y más en la “Colombia Profunda” es un Imperativo categórico, que se debe implementar, teniendo en cuenta los aspectos de promoción de la cultura del respeto, prevención de las hostilidades y agresiones contra la sacra Misión Médica.
4. La protección, tratamiento y rehabilitación a que hubiere a lugar debe ceñirse a una ruta de atención establecida, porque:
5. De perdurar esta ominosa costumbre, la tan anhelada y muchas veces legislada, Atención Primaria en Salud, seguirá siendo, sin remedio, eso, una vieja ley muerta, de las tantas que habitan en el gran cementerio de leyes que es Colombia.
Además, precisamos la importancia de no minimizar estos hechos, y de contar con la colaboración de todos, a fin de prevenirlos y tratarlos.
En este sentido, solicitamos el compromiso serio y efectivo de las autoridades, y ofrecemos, en la medida de nuestras capacidades, la colaboración posible para lograr eficacia y resultados palpables y positivos. Para ello, proponemos, con nuestra participación incluida, una reunión local en la Secretaría de Salud de Santander, entre las autoridades de salud departamentales y municipales, Policía y Fiscalía.
Asimismo, solicitamos muy comedidamente al Señor Ministro de Salud y Protección Social, otra reunión del mismo carácter, igualmente con nuestra participación, para revisar, actualizar y definir acciones conjuntas y efectivas en el marco de la ruta de atención definida para la protección del personal sanitario; incluyendo, por
supuesto, el análisis a fondo de la existencia, eficiencia y pertinencia del Servicio Social Obligatorio en el actual sistema de salud, teniendo en cuenta la actual reforma en curso.
Cordialmente:
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