El fentanilo es un opioide sintético que ha causado una epidemia mortal en todo el mundo. Exploraremos la verdad detrás de este fármaco, incluyendo su historia, sus efectos y las medidas que se están tomando para abordar esta crisis de salud pública
Por Dr. Andrés Camilo Clavijo Rodríguez – Médico especialista en toxicología clínica de la Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud (FUCS) – Ministerio de Salud y Protección Social – Subdirección de Salud Ambiental
1. Introducción: ¿qué es el fentanilo y por qué está causando una epidemia mortal?
Las drogas sintéticas constituyen uno de los problemas de drogas más importantes a nivel mundial. Después del cannabis, los estimulantes de tipo anfetamínico son la segunda droga más consumida en todo el mundo, y sus niveles de consumo a menudo superan los de la heroína y/o la cocaína.
El crecimiento continuo del mercado de nuevas sustancias psicoactivas en los últimos años se ha convertido en un desafío político y una importante preocupación internacional.
El fentanilo se sintetizó por primera vez en 1959 y en 1964 se sometió a fiscalización internacional como sustancia de la Lista 1 en virtud de la Convención Única sobre Estupefacientes de 1961.
Durante las décadas siguientes, la lista de sustancias catalogadas ha crecido hasta incluir todos los análogos del fentanilo aprobados de uso médico (sufentanilo en 1980, alfentanilo en 1984 y remifentanilo en 1999), y varios análogos que no se han convertido en productos farmacéuticos (acetil-alfa-metilfentanilo, alfametilfentanilo y 3-metilfentanilo) fueron sometidos a fiscalización internacional en 1988.
El fentanilo es un potente analgésico, sedante y ampliamente utilizado en el tratamiento del dolor intenso y en anestesia, pero se ha convertido en una droga recreativa con un número cada vez mayor de muertes particularmente en América del Norte.
Sin embargo, siempre ha habido preocupación por su potencial de abuso y dependencia, incluso en los decenios de 1970 y 1980, aparecieron en el mercado de drogas ilícitas productos que contenían fentanilo y sus análogos, y se convirtieron en famosos por sobredosis accidentales. Al día de hoy el problema parece haber resurgido en la fabricación clandestina de fentanilo a niveles sin precedentes. Los materiales y equipos necesarios para la fabricación están disponibles en línea y a bajo costo.
Esta sustancia es altamente adictiva y puede ser fatal incluso en bajas dosis. La producción y distribución ilegal de fentanilo ha aumentado en los últimos años, lo que ha hecho que esta droga sea aún más accesible para las personas que buscan drogas recreativas.
De ahí la importancia de tomar medidas para combatir la epidemia de fentanilo, incluyendo la educación pública sobre los peligros de su consumo, la prevención y el tratamiento de la adicción, acompañadas de la implementación de políticas gubernamentales efectivas para frenar su producción, distribución ilegal y promover alternativas más seguras para el manejo del dolor.
2. El uso médico del fentanilo: ¿cómo se usa en el tratamiento del dolor?
El fentanilo es un potente analgésico que se utiliza en el tratamiento del dolor crónico y agudo. Este medicamento actúa sobre los receptores opioides en el cerebro y el sistema nervioso central, reduciendo la percepción del dolor. El fentanilo se puede administrar en diferentes formas, como parches transdérmicos, pastillas, inyecciones y aerosoles nasales.
Sin embargo, su uso debe ser supervisado por un médico y se debe seguir estrictamente la dosis prescrita, ya que el fentanilo es altamente adictivo y puede causar efectos secundarios graves, como depresión respiratoria, sedación y coma. Es importante destacar que el fentanilo no debe ser utilizado para tratar el dolor leve u ocasional, ya que existen otras opciones de tratamiento más seguras y efectivas.
En resumen, el uso médico del fentanilo es una herramienta valiosa en la lucha contra el dolor, pero su uso indebido o recreativo puede tener consecuencias mortales.
3. El fentanilo como droga recreativa: ¿cómo se consume y cuáles son sus efectos?
El fentanilo es una droga opiácea sintética que se usa principalmente para tratar el dolor extremo en pacientes con cáncer o después de una cirugía. No obstante, en los últimos años, el fentanilo se ha vuelto muy popular debido a su potencia y al efecto narcótico.
El fentanilo recreativo se consume de diversas formas, como inyectado, inhalado o en forma de parche. Los efectos del fentanilo incluyen euforia intensa, sedación y analgesia, pero también puede tener secundarios graves, como la depresión respiratoria y la muerte por sobredosis.
La epidemia de sobredosis de fentanilo es especialmente peligrosa porque la dosis letal es mucho más baja que la de otras drogas opiáceas, lo que la convierte en una sustancia extremadamente peligrosa.
4. La epidemia de sobredosis de fentanilo: ¿por qué es más peligroso que otras drogas opiáceas?
La epidemia de sobredosis de fentanilo es más peligrosa que otras drogas opiáceas por varias razones. En primer lugar, el fentanilo es mucho más potente que otras drogas como la heroína y la morfina, lo que significa que se necesitan cantidades mucho más pequeñas para obtener el mismo efecto. Esto hace que sea mucho más fácil para las personas sobredosificarse sin darse cuenta.
Además, el fentanilo se ha encontrado en muchas drogas callejeras, como la cocaína y la metanfetamina, lo que significa que las personas que no buscan específicamente el fentanilo pueden estar expuestas a él sin saberlo. Finalmente, el fentanilo es extremadamente adictivo, y una vez que alguien se engancha, puede ser muy difícil dejarlo. En general, la epidemia de sobredosis de fentanilo es un problema grave que requiere atención inmediata y acción para prevenir más muertes.
5. La producción y distribución ilegal de fentanilo: ¿quiénes están detrás del negocio ilícito?
La producción y distribución ilegal de fentanilo es un negocio altamente lucrativo. Los fabricantes y distribuidores de fentanilo operan en la clandestinidad, estos traficantes a menudo obtienen el fentanilo de laboratorios clandestinos en China y lo importan a los Estados Unidos de manera ilegal. También se ha informado que algunos traficantes en México han comenzado a producir fentanilo en pequeñas cantidades para abastecer el mercado estadounidense.
Los consumidores de fentanilo ilícito son mezclas con otras drogas como cocaína, heroína, metanfetamina y MDMA; esto es especialmente peligroso porque quien consume esas drogas por lo general no sabe que se les ha agregado fentanilo, a menudo no tienen idea de lo que están comprando y consumiendo, lo que aumenta el riesgo de sobredosis y muerte.
Es importante que las autoridades de todo el mundo sigan trabajando juntas para detener la producción y distribución ilegal de fentanilo y proteger a la sociedad. En Colombia, se presentó un proyecto de ley busca sancionar el tráfico, fabricación y porte de esta sustancia en el país.
6. Las medidas gubernamentales para combatir la epidemia: ¿son suficientes?
Estados Unidos ha lanzado una Coalición Mundial para Abordar las Amenazas de las Drogas Sintéticas, que busca unir a los países de todo el mundo en un esfuerzo concertado para prevenir la fabricación y el tráfico ilícitos de drogas sintéticas, incluido el fentanilo. La coalición planea volver a reunirse al margen de la 78.ª Asamblea General de las Naciones Unidas y la Comisión de Estupefacientes de las Naciones Unidas de marzo de 2024 para compartir avances y logros. Además, Colombia se ha unido a una coalición internacional creada por Estados Unidos para combatir el tráfico de fentanilo y otros opioides. Las medidas gubernamentales buscan combatir la epidemia y son un tema crucial en la lucha contra esta droga.
A pesar de los esfuerzos realizados por los gobiernos para regular la producción y distribución de fentanilo, la epidemia sigue en aumento.
Por ejemplo, en Estados Unidos, las autoridades han implementado medidas como la creación de bases de datos de prescripción de opiáceos, la educación sobre el uso seguro de medicamentos y el acceso a la naloxona, un antídoto para las sobredosis de opiáceos. Aun así, estas medidas no han sido suficientes para detener la epidemia. Se necesitan soluciones más efectivas y coordinadas que involucren a la sociedad para abordar este problema de manera integral.
7. Los desafíos en la prevención y tratamiento de la adicción al fentanilo: ¿qué se puede hacer para ayudar a las víctimas?
Uno de los desafíos más grandes en la prevención y tratamiento de la adicción al fentanilo es la falta de conciencia y educación sobre los peligros del consumo de esta droga. Muchas personas no entienden la gravedad de la situación y no saben cómo buscar ayuda si están lidiando con una adicción. Además, el estigma social asociado con la adicción a menudo impide que las personas busquen tratamiento, por lo que es necesario reducir el estigma asociado con la adicción.
También es importante crean un fondo y movilizar recursos donde se creen programas especializados para la atención en salud, se brinde apoyo psicológico como terapias conductuales, ya que estas ayudan a las personas a modificar su actitud y el comportamiento con relación al consumo de la droga, a aumentar su habilidad para llevar una vida sana, modifica las expectativas y el comportamiento del paciente con relación al consumo de la droga y enseña a manejar los factores desencadenantes y el estrés en forma eficaz.
Estos son algunos pasos que puede seguir en tales situaciones:
Exprese sus preocupaciones: hable con la persona que tiene la drogodependencia acerca de sus preocupaciones y el impacto que su adicción está teniendo en su vida y en la de quienes la rodean. Sea honesto y compasivo, pero evite juzgar o criticar.
Infórmese: aprenda sobre la adicción, sus efectos y las opciones de tratamiento disponibles. Este conocimiento puede ayudarle a comprender mejor la situación y comunicarse más eficazmente con su ser querido.
Establezca límites: si bien es esencial ofrecer apoyo, también es crucial establecer límites para protegerse a usted mismo y a los demás de las consecuencias negativas de su adicción. Esto puede incluir negarse a tolerar su comportamiento o brindar apoyo financiero para el consumo de drogas.
Considere organizar una intervención: eso implica una conversación estructurada con la persona que lucha contra la adicción dirigida por un profesional. El objetivo es ayudarlos a comprender el impacto de su adicción y alentarlos a buscar tratamiento.
Busque apoyo para usted mismo: lidiar con la adicción de un ser querido puede ser un desafío emocional y mental. Considere unirse a un grupo de apoyo para familiares y amigos de adictos o recurrir a terapia individual para ayudar a la persona con la dependencia a superar esta difícil situación. Recuerde que, en última instancia, la decisión de buscar tratamiento recae en la persona que lucha contra la adicción. Puede ofrecer apoyo y recursos, pero el adicto debe estar preparado para dar el primer paso hacia la recuperación.
8. El papel de la educación pública en la lucha contra el fentanilo: ¿cómo podemos concientizar a la sociedad sobre los peligros del consumo del fármaco?
El papel de la educación pública es fundamental en la lucha contra el fentanilo, ya que la concientización sobre los peligros de su consumo es clave para prevenir la adicción y la sobredosis. Es necesario que se promueva este tipo de educación en los colegios y universidades, así como en los medios de comunicación y redes sociales. Además, se deben implementar campañas de prevención y sensibilización dirigidas a la población en general y a los grupos de mayor riesgo, como los jóvenes y las personas que padecen dolor crónico. La educación también puede incluir la promoción de alternativas más seguras para el manejo del dolor, como la terapia física y ocupacional, la acupuntura y la meditación.
9. Perspectivas futuras sobre el problema del fentanilo: ¿cómo podemos abordar este problema a largo plazo?
Para abordar el problema del fentanilo a largo plazo, es necesario tomar medidas a nivel global y nacional. Una de las principales acciones que se pueden llevar a cabo es la cooperación entre los países productores, distribuidores y consumidores de esta droga. Esto significa trabajar juntos para combatir la producción y el tráfico ilegal de fentanilo, así como para educar a la población sobre los peligros del consumo de esta sustancia.
Además, se deben mejorar los sistemas de atención médica y tratamiento para las personas adictas no solo al fentanilo, sino a las nuevas sustancias de abuso que están circulando. Se debe promover alternativas más seguras y eficaces para el acceso al tratamiento con creación de programa especializados.
También es crucial que los gobiernos implementen políticas públicas que reduzcan la estigmatización y la discriminación hacia las personas que sufren de adicción, y que se destinen recursos adecuados para la prevención y el tratamiento de esta enfermedad.
Adicionalmente, hay que apoyar la investigación para desarrollar e implementar estrategias de tratamiento seguras, efectivas y deseables que respalden los objetivos a largo plazo de estos pacientes.
10. La necesidad urgente de actuar para detener la epidemia mortal causada por el consumo de fentanilo
En conclusión, la epidemia de sobredosis de fentanilo es un problema grave y urgente que requiere acción inmediata. La producción y distribución ilegal de esta droga está en manos de grupos criminales que no tienen en cuenta la salud y seguridad de las personas que consumen sus productos. Además, la falta de regulación y control en la prescripción médica del fentanilo ha contribuido al aumento del consumo recreativo y la adicción.
Es necesario que los gobiernos tomen medidas sinérgicas para combatir este problema, incluyendo la educación pública sobre los riesgos del consumo de fentanilo y la implementación de programas de prevención y tratamiento para las personas adictas. La colaboración entre los sectores público y privado también es crucial para abordar este problema a largo plazo antes de que sea demasiado tarde.
El uso de opioides en medicina es un tema importante que requiere atención y cuidado, su uso prolongado o inadecuado puede llevar a la adicción y otros efectos secundarios graves.
Por lo anterior, es importante que los pacientes que toman opioides sigan las instrucciones de su médico.
Muy interesante este estudio, ya que así surge la alarma ante los entes de control para detener este flagelo que va acabar con la humanidad.