Canadá legalizó la eutanasia en 2016, mucho después de Bélgica y los Países Bajos, pero ya es el líder mundial en eutanasia para la donación de órganos.
Una encuesta de la práctica en todo el mundo en el American Journal of Transplantation encontró que hasta 2021, la donación de órganos después de la eutanasia (ODE) se había realizado 286 veces en Canadá, los Países Bajos, España y Bélgica.
Esto incluyó ocho casos de ODE desde el hogar (ODEH). Hubo 136 casos en Canadá, 86 en los Países Bajos, 57 en Bélgica y 7 en España. En total, se donaron 1131 órganos a 837 pacientes receptores.
Estas cifras incluían 2020 y 2021, cuando los trasplantes de órganos cayeron a causa de Covid. Por lo tanto, se puede esperar que las cifras para 2022 y 2023 aumenten, quizás considerablemente.
Si bien ODE puede ser legal en estos países, los gobiernos no parecen estar entusiasmados. “Las leyes actuales no prohíben la ODE, pero tampoco mencionan la posibilidad, y los órganos reguladores solo hacen declaraciones cautelosas, como ‘La terminación voluntaria de la vida mediante la eutanasia no excluye necesariamente la donación de órganos y tejidos’. O, para ODEH, ‘El comité considera el procedimiento en principio como una ruta viable, siempre que no impida un establecimiento cuidadoso de la muerte’”.
Sin embargo, muchas organizaciones del derecho a morir, grupos de cabildeo de pacientes, pacientes individuales y organizaciones de distribución de órganos lo apoyan abiertamente.
Es importante distinguir la donación de órganos tras la eutanasia de la eutanasia por donación de órganos, que sería homicidio.
Arthur Schafer, especialista en ética de la Universidad de Manitoba, dijo a la VOA que estaba complacido de ver a Canadá a la vanguardia.
“Me enorgulleció mucho saber que a los pacientes canadienses que reciben asistencia médica para morir se les ha dado la oportunidad de hacer algo moralmente significativo con su muerte, al optar por dar vida a otros pacientes a través de sus órganos”.
Sin embargo, Nicole Scheidl, de Physicians for Life, con sede en Ottawa, declaró que las cifras la sorprendieron. “Realmente socava el marco de la donación de órganos en este país”.
Fuente: BioEdge
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