UN ENSAYO GENÓMICO Y NEUROCIENTÍFICO & HISTÓRICO Y HUMANÍSTICO
Actualidad, Opinión

UN ENSAYO GENÓMICO Y NEUROCIENTÍFICO & HISTÓRICO Y HUMANÍSTICO


Una guía para entender al individuo humano y a la humanidad.


PARTE XI


LAS NEURONAS ESPECIALISTAS EN SEXO Y AMOR ERÓTICO AGUDO


Por Stevenson Marulanda Plata – Presidente del Colegio Médico Colombiano

Las revelaciones más valiosas que surgen hoy sobre la mente humana no provienen de las disciplinas dedicadas tradicionalmente al estudio de la mente, como la filosofía, la psicología o el psicoanálisis, sino de una combinación de dichas disciplinas con la biología del cerebro”

Eric R. Kandel. Neurocientífico USA, Nobel de medicina 2000


RESONANCIA ERÓTICA

NUCLEAR MAGNÉTICA FUNCIONAL

La mente es un fenómeno físico más

Elocuencia electromagnética. Las flechas señalan áreas rojas, brillantes y encendidas. Es la resonancia de los núcleos de los átomos de hidrógeno, sodio, fósforo y otros, de las neuronas eróticas del DISPOSITIVO CEREBRAL DEL EMPAREJAMIENTO SEXUAL, cuando se estimulan eróticamente el clítoris y la vagina. Imagen cerebral por Resonancia Nuclear Magnética Funcional (IRNMF) de un orgasmo de una mujer.

El VITALISMO

Desde la época de Aristóteles existen corrientes de pensamientos filosóficas y religiosas que pregonan que la vida es un soplo metafísico divino, que no puede crearse a partir de las mismas sustancias vulgares que hay en la naturaleza inorgánica.

Durante los siglos XVII y XVIII, un grupo de biólogos, químicos, filósofos y teólogos, evadidos del método científico, abrazaron el antiguo vitalismo descarnado del filósofo griego, y empoderados con el romanticismo de esos siglos, convencidos, decían cosas como esta:

Toda “la naturaleza animada” está imbuida de un “animus” orgánico especial, de una fuerza vital, una música divina,  como una brisa que hace resonar un arpa, que no puede reducirse a ninguna materia o fuerza química o física.

Y, poéticamente:

Y, ¿no serán los seres animados

arpas dispuestas de diverso modo

que se hacen pensamiento cuando sopla,

viva y vasta, una brisa intelectual,

de cada una el alma, Dios de todas?

Samuel Taylor Coleridge – Vitalista romántico – 1795

LA MENTE Y EL RESTO DEL COSMOS NO SON COSAS DIFERENTES

“Todas y cada una de las partes del cuerpo y la mente humanos tienen una base física que cumple con las leyes de la física y la química. Y, hasta donde podemos afirmar, gracias a la constante investigación científica, todas ellas se originaron mediante la evolución por selección natural”.

Edward O. Wilson

Ignoraban los románticos vitalistas, que esa “brisa que hace resonar un arpa”, es una brisa electromagnética, producida por la resonancia de los núcleos de los átomos de las cien mil millones de neuronas existentes en nuestro cerebro sapiens, y que esa  “arpa”, que toca esa “música divina” como un telar encantado, es nuestra mente que, modulada por unas sustancias químicas llamadas neurotransmisores, es la víscera que soporta nuestros deseos, placeres, pasiones, emociones, sentimientos, recuerdos, percepciones, sensaciones, pensamientos, cálculos, talentos  y habilidades.

La física de la Imagen por Resonancia Nuclear Magnética (RMN) se basa en el fenómeno de la resonancia magnética de los núcleos de los átomos de hidrógeno, sodio, fósforo y otros, de ahí su nombre, y se obtiene cuando la materia física del cuerpo del paciente se somete a un potente campo magnético estático muy intenso.

NATURA NON FACIT SALTUM. (La naturaleza no da saltos).

La invención de la sexualidad (sensualidad, erotismo, orgasmo y amor erótico) —sistema controlado de intercambio de ADN y de multiplicación de las especies—, hace miles de millones de años, igual que todos los poderes y capacidades biológicas y psíquicas de la mente humana, son fuerzas atómicas y moleculares del universo, y hacen parte de la historia continua, sin saltos, de la evolución  biológica de la mente y la psicología del Homo sapiens en la Tierra, desde el origen de la vida hace 3.500 millones de años, pasando por la invención de las células y de los organismos multicelulares, hasta fabricarnos a nosotros (cuerpo y mente) y a las grandes y complejas sociedades humanas.

LAS NEURONAS DEL SEXO Y DEL AMOR ERÓTICO

DISPOSITIVO DEL EMPAREJAMIENTO SEXUAL

Nexo de unión que conecta la mente con el cuerpo.

Las neuronas que se especializaron en las delicias del sexo y el amor erótico agudo y se organizaron en un órgano en lo profundo de nuestro cerebro, son un  dominio superior invisible que nos sobrepasa y nos  determina a ejercer nuestra sexualidad y se conocen con el nombre de Dispositivo del Emparejamiento Sexual.

NO HAY NINGUNA DICOTOMÍA ENTRE MENTE Y COSMOS

Friedrich Hayek

Hayek, filósofo y economista de la escuela liberal austriaca, contrario a los dualistas aristotélicos, agustinianos, tomistas y románticos vitalistas, pensaba como monista, que no hay ningún salto, ninguna separación entre la materia de que está hecha la mente humana y la materia cósmica.

La mente humana no fue ningún salto de la naturaleza, fue apareciendo poco a poco, en la medida que el cerebro, primero simio, después homínido y por último sapiens, fue aumentado su volumen y calidad y cantidad de neuronas y conexiones entre ellas (sinapsis), desde 450 centímetros cúbicos hasta los 1500 que tenemos hoy.

Interpretando a Hayek desde el principio NATURA NON FACIT SALTUM, el cerebro humano y su consustancial mente (ochenta y cinco mil millones de neuronas) —el objeto más complejo fabricado en la Tierra, y de pronto en todo el inmenso universo—, fue hecho por la evolución biológica, poco a poco, gradualmente, de manera continua, sin saltos, a través de miles de millones de años,  desde que apareció la vida en este planeta, incorporando la física y la química no viva (átomos y moléculas inanimados) al mundo orgánico y animado de las células.

De este modo,  y con tal parentesco, este ensamblaje neuronal, sus conexiones nerviosas y pasadizos secretos con los cinco sentidos,  la memoria (el alma de la conciencia) y con los pudendos anillos de fuego púbicos, peneanos, clitorianos y vaginales,  escondrijos santuarios íntimos del placer erótico, son hermanos materiales  de  todos los cuerpos celestes de todas las galaxias, incluyendo  a los elementos de la Tierra: tierra, fuego, aire y agua.

DESCARTES ESTABA EQUIVOCADO

Los átomos y moléculas de un cuerpo animal, incluyendo el humano, se organizan en células —unidades fundamentales y básicas de organización y función común a todos los seres vivos—, autónomas e independientes con  doble vida: una dedicada a su propio e individual cuerpo y función, y la otra, al organismo al que pertenecen y se deben, como el individuo en una sociedad.

“Este libro es la historia de la célula. Es una crónica del descubrimiento de que todos los organismos, incluidos los seres humanos, están constituidos por estas “partículas elementales”. Es la historia de cómo las agrupaciones cooperativas y organizadas de estas unidades vivas autónomas —tejidos, órganos, aparatos y sistemas— permiten que se desarrollen mecanismos fisiológicos complejos: la inmunidad, la reproducción, la sensibilidad, la cognición (…)”

Siddhartha Mukherjee en: La armonía de las células.

De esta manera, las células son individuos biológicos, autónomos e independientes, super especializados en oficios únicos, nítidos, exactos y diferentes, trabajo que ejecutan en comunidades de miles de millones de ellas, como familias unidas en grupos compactos física y funcionalmente —tejidos, órganos, aparatos y sistemas—. Allí, cada una de ellas, absortas en su sitio, se concentran en su trabajo rutinario y específica función cooperativa, trabajo que pone a disposición de la planta o animal a que pertenece.

Esto explica científicamente que el cuerpo humano y su mente, como parte inseparable de él,  es una sola unidad —paradigma de eficiencia biológica—, conformada por células especializadas que se dividen el trabajo y cooperan entre sí para que  exista, sobreviva, se reproduzca y sea feliz.

Descartes, aristotélicos, agustinianos, tomistas y los románticos vitalistas estaban equivocados porque en sus tiempos era imposible entender la “TEORÍAS ATÓMICA Y CELULAR”, y desafiando el principio NATURA NON FACIT SALTUM, teológicamente pensaban que la mente era un soplo divino que había dado un salto en forma de espíritu y se había separado del cuerpo en forma de alma, y su existencia, modo “sustancia pensante” era independiente de toda materia.

Descartes inauguró la teoría del dualismo científico, que separa radicalmente el cuerpo de la mente. En contraposición nació el monismo, para significar que cuerpo y alma son una unidad indivisible.

EL CEREBRO ES LA REINA INTELIGENTE Y FÉRTIL, LOS DEMÁS ÓRGANOS SON LAS OBRERAS ESTÉRILES

Así, las células:

Del pulmón respiran, del corazón bombean la sangre y del riñón la filtran.

De los intestinos digieren la comida, del páncreas atrapan su energía y del hígado la depositan y administran el laboratorio corporal.

De la sangre transportan la energía y  las tropas bélicas de defensa contra invasores y extraños.

Y, mientras tanto, las de los huesos sostienen el cuerpo, las de los músculos lo mueven, y las de los nervios y hormonas conducen la información y la electricidad; las del cerebro, las neuronas, planifican, piensan, calculan riesgos, beneficios, sacan cuentas, sienten deseos y placeres, perciben el espectáculo del mundo, hacen arte, hablan, sufren, gozan, recuerdan, siente nostalgia y dolor, nos identifican, se erotizan, se enamoran, tienen sexo y sienten orgasmo, y junto con las de los testículo y ovarios lo reproducen.

De este modo, como dijo el padre de la patología celular, el médico alemán,

Rudolf Virchow:

El cuerpo es un Estado celular donde cada célula es un ciudadano”

LA SEXUALIDAD NO ES UN DISPOSITIVO FILOSÓFICO

1. Las neuronas que se especializaron en sexo y amor erótico agudo, y se organizaron como un órgano en lo profundo de nuestro cerebro  como un dispositivo mental —nexo de unión que conecta la mente con los órganos sexuales reproductores internos y externos—, que nos sobrepasa y nos determina a ejercer nuestra sexualidad, es un hecho de la  inteligencia y naturaleza de los átomos y moléculas del universo.

2. La sexualidad animal y nuestra, no es un constructo o hipotética narrativa teórico-filosófica que se puede desnaturalizar y deconstruir, para tratar de comprender y explicar el comportamiento sexual humano.

3. La sexualidad animal y nuestra, no es una estructura de biopoder que dispone de nosotros y nos domina desde afuera de nuestro cuerpo, como diría Foucault, el célebre filósofo deconstructor del siglo XX.

LA SEXUALIDAD NO ES UN PODER INDEPENDIENTE DE LOS OTROS PODERES DEL  UNIVERSO

1. El Dispositivo Cerebral del Emparejamiento Sexual como todo ente vivo, es un continuum de materia-energía-espacio-tiempo, hijo legítimo de los átomos del universo, ordenados por estrictos niveles de inteligencias y capacidades atómicas y moleculares  en la tabla de Mendeléyev.

2. La sexualidad escrita con letras eternas de ADN en el Dispositivo Cerebral del Emparejamiento Sexual es un descomunal  poder: sensual, erótico, orgásmico y amoroso, con el ímpetu de los terremotos, los huracanes y los tsunamis, que nos sobrepasa,  y genómicamente nos determina irremediablemente a mover la brújula sexual y buscar sexo donde se encuentre.

3. La sexualidad es un poderoso fenómeno genómico que mueve al mundo social con una fuerza monstruosa compuesta por varios elementos: la atrayente gravedad de la sensualidad, la electrizante electricidad del erotismo, el misterioso y cuántico electromagnetismo del orgasmo, y el ardoroso fuego de la pasión del amor erótico agudo.

Fonseca La Guajira, octubre 13 del 2023.

octubre 13, 2023

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