La viruela del mono humana requiere un contacto muy cercano para que se transmita entre personas. la OMS pidió estar atentos y adoptar medidas sanitarias para evitar la propagación de este virus.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) no ha podido establecer con certeza el medio de contagio de esta enfermedad que se ha propagado en las últimas dos semanas por más de doce países.
La OMS advirtió que hay que esperar que sigan apareciendo casos de viruela del mono, una enfermedad de la que se tuvo conocimiento por primera vez en humanos en la República Democrática del Congo en 1970. Y si bien en los últimos 50 años se han reportado casos aislados principalmente en países de África Central y Occidental, la Organización Mundial de la Salud califica el riesgo endémico como extremadamente bajo, pues las infecciones y los casos sospechosos registrados hasta ahora en Europa y algunos países de América, como Canadá, Estados Unidos y Argentina son, al parecer, de la variante de África Occidental, que, en contraste con la variante de África Central, tiene un curso más leve.
“La situación está evolucionando de tal modo que la OMS cree que habrá más casos de viruela de mono que se identifiquen a medida que la vigilancia se extiende en países que no son endémicos”, señaló la organización en una nota epidemiológica.
La viruela de los monos o viruela símica (monkey pox, en inglés), una zoonosis causada por Ortopoxvirus que transmitida a los humanos provoca unos síntomas similares -aunque más leves- a la enfermedad ya desaparecida desde hace más de cuatro décadas.
El agente patógeno que causa la viruela del mono circula probablemente en los roedores. Los monos se consideran los llamados falsos huéspedes. Un falso huésped puede ser infectado, pero el parásito no puede desarrollarse más en él.
Las infecciones pueden transmitirse a través del contacto con las secreciones de los animales infectados. La transmisión se produce principalmente a través de las mordeduras (ardillas, ratas, primates), del contacto con la sangre y las secreciones de los animales, de la ingestión (carne de mono infectada) y de la infección por gotas. Es decir, una zoonosis clásica, causada por el contacto cercano o el consumo de animales infectados.
La viruela del mono se aisló por primera vez en 1958 cuando se observaron dos brotes de una enfermedad similar a la viruela en colonias de monos que se mantuvieron para la investigación, lo que llevó al nombre de “viruela del mono”, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés). El primer caso humano de viruela del mono se informó años después, en 1970, en la República Democrática del Congo, durante una época en que se estaban realizando intensos esfuerzos para eliminar la viruela.
La OMS señaló que las personas que tienen un mayor riesgo de contagio son aquellas que tienen contacto físico cercano con alguien infectado y con síntomas. De los casos reportados no se ha podido establecer que alguno de los afectados haya estado en alguna zona endémica de esta enfermedad, la cual se ha identificado principalmente (aunque no exclusivamente) entre hombres que tienen sexo con otros hombres, explicó la OMS.
En ese mismo sentido, el profesor Jimmy Whitworth, catedrático de Salud Pública Internacional de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres (London School of Hygiene & Tropical Medicine -LSHTM-, afirmó que: “La vía de propagación más probable en este grupo es el contacto cercano: tocar la piel o la ropa de cama o compartir utensilios. No es necesario suponer una transmisión sexual a través de las secreciones genitales u orales”.
Es importante reconocer los primeros síntomas
El periodo de incubación de la viruela del mono es de siete a 21 días, pero los síntomas suelen aparecer al cabo de 10 a 14 días. Entonces, además de la erupción cutánea, pueden aparecer dolor de cabeza, muscular y de espalda, fiebre, escalofríos, agotamiento e inflamación de los ganglios linfáticos.
Los síntomas de esta variedad de viruela son similares a los de la gripe. Pueden incluir:
- Fiebre,
- Dolor de cabeza,
- Dolores musculares
- Inflamación de los ganglios linfáticos.
La infección se caracteriza por una erupción cutánea con pústulas y ampollas que se abren al cabo de un tiempo y sobre las que luego se forman costras. Rara vez se forman cicatrices permanentes. La erupción tiene un aspecto diferente según la fase y puede parecerse a la varicela. Después de unas tres o cuatro semanas, la enfermedad desaparece. Solo cuando afecta a niños muy pequeños la infección puede tener efecto severos.
Aunque no existe un tratamiento propio ni una vacuna contra la viruela del mono, los científicos consideran que la vacuna contra la viruela es efectiva para esta variedad debido a que se ambos virus pertenecen al género Orthopoxvirus, y esa familiaridad es la que hace que sistema inmunitario cree defensas contra la infección. Es por esa razón que los Funcionarios de CDC están evaluando si se debe ofrecer la vacuna contra la viruela a los trabajadores de la salud que tratan a pacientes con viruela del mono y otras personas que pueden tener un “alto riesgo” de exposición a este virus.
La identificación de casos confirmados y sospechosos de viruela del mono sin antecedentes de viaje a una zona endémica en varios países es atípica, por lo que es urgente concientizar sobre la viruela del mono y llevar a cabo una búsqueda exhaustiva de casos y su aislamiento, rastreo de contactos y cuidados de apoyo para limitar la transmisión posterior”, dijo la organización de la ONU en Ginebra.
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