Además de la eficacia, la distribución de las vacunas COVID-19 y del buen cumplimiento de los planes nacionales de vacunación, es importante mantener las medidas de protección para controlar el impacto las nuevas variantes.
Pese al desarrollo de la vacuna contra el COVID-19 en tiempo récord, lo cierto es que el virus ha seguido su proceso de expansión y causando nuevas preocupaciones por la aparición de diferentes variantes y las posibles reinfecciones, afirma el doctor Alfonso J. Rodríguez Morales, vicepresidente de la Asociación Colombiana de Infectología y presidente del Comité de Medicina del Viajero.
En más de año y medio de pandemia, el mundo superó las cuatro millones de muertes por la infección por COVID-19 y pese a que según las cifras suministradas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 25 por ciento de la población mundial ya está inmunizada, el planeta aún está lejos de alcanzar la inmunidad de rebaño.
Después de la Lambda, que se originó en Perú y se conoce como la variable Andina, ahora los ojos del mundo están puestos en la Delta, responsable en este momento de uno de cada cinco casos de COVID-19 en Estados Unidos y de más del 90 por ciento de los casos nuevos en Reino Unido, Rusia e Israel.
Según la evidencia científica recopilada hasta la fecha, la mayoría de las muertes por COVID-19 en los países que tienen una alta cobertura en vacunación se presentan en personas que no han sido inoculadas o que no completaron el esquema de vacunación, lo que evidencia la efectividad de las vacunas.
En ese sentido, el doctor Rodríguez- Morales, quien es además docente e investigador senior de la Fundación Universitaria Autónoma de las Américas en Pereira, Risaralda, subrayó que si bien no existen vacunas que protejan un cien por ciento, es importante recalcar que todas las vacunas que han sido aprobadas por la OMS siguen ofreciendo una efectividad muy importante contra las variantes más peligrosas.
“La evidencia muestra que el riesgo de muerte se reduce considerablemente en las personas inoculadas, así como la enfermedad grave por COVID-19. De ahí que quienes estén totalmente inmunizados están mejor preparados para poder enfrentar nuevos picos de la pandemia. La protección ofrecida por una sola dosis parece ser poca y, por supuesto, los no vacunados siguen siendo los de mayor riesgo”.
Deja un comentario