Cada día se prenden nuevas alarmas con respecto a la epidemia del sobrepeso y la obesidad, pero también son mayores los esfuerzos para tratar de controlarla.
En Colombia, el 51 por ciento de la población Colombia, tiene sobrepeso y obesidad. El 70 por ciento de la carga de obesidad está asociada a enfermedades crónicas no transmisibles como enfermedades cardiovasculares, respiratorias, cáncer y diabetes.
Al otro extremo, uno de cada diez niños en Colombia está desnutrido. Según la Encuesta Nacional de la Situación Nutricional en Colombia(ENSIN), la tasa de desnutrición infantil es del 13.2 por ciento y en algunas zonas este índice es superior al 34 por ciento.
Ante esa realidad, varias organizaciones no gubernamentales, asociaciones civiles, grupos de académicos y otros profesionales firmaron la Alianza por la Salud Alimentaria para trabajar temas como los derechos de la salud, el ambiente sano, la alimentación adecuada, la seguridad y la autonomía alimentarias en Colombia.
Esta Alianza promueve el uso de mecanismos y espacios de participación ciudadana para incidir en la construcción de políticas públicas.
Entre sus objetivos está la reglamentación de la Ley 1355 de 2009 (de obesidad) con los parámetros de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la adopción de medidas que alerten sobre el consumo de comestibles y bebidas perjudiciales para la salud, el diseño de etiquetas que informen con claridad los contenidos de los productos, la distribución de alimentos saludables en los colegios, el cumplimento del Código Internacional de Comercialización de Sucedáneos de la Leche Materna de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la aprobación de impuestos saludables, cuyo recaudo se destine a la salud, a la ampliación de redes de agua potable y al saneamiento básico.
La finalidad es invertir más esfuerzos en educar y hacer prevención para mejorar los hábitos alimentarios de la población colombiana y disminuir los índices de obesidad.
El efecto que se persigue es disminuir la incidencia y la mortalidad por enfermedades crónicas no transmisibles que están directamente relacionadas con el consumo de alimentos altos en azúcar, sodio y grasa.
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