Con ocasión de la celebración especial del Día Panamericano del Médico, el presidente de la junta directiva del Colegio Médico Colombiano, doctor Stevenson Marulanda Plata; el doctor José Ignacio Madero Cervera, miembro de la junta directiva, junto al presidente de la Asociación de Médicos Generales de Barranquilla (ASOMEB), Atilio Nuñez; y de la presidenta del Colegio Médico Colombiano regional Atlántico, Anny Orjuela, le otorgaron la Medalla Esculapio, José Félix Patiño Restrepo al doctor Carlos Malabet como reconocimiento a su destacada trayectoria académica y profesional.
La Asociación de Médicos Generales de Barranquilla (ASOMEB) y el Colegio Médico Colombiano, en un esfuerzo conjunto, ofrecieron una cena en conmemoración del Día Panamericano del Médico, el pasado 3 de octubre. El evento, cargado de emotividad, contó con la participación de las juntas directivas de ASOMEB, del Colegio Médico Colombiano regional Atlántico y de destacadas autoridades académicas de la ciudad.
Durante la velada, se otorgó la máxima distinción que hace el Colegio Médico Colombiano, la Medalla Esculapio, José Félix Patiño Restrepo, al insigne médico ginecoobstetra barranquillero Carlos Malabet, en reconocimiento a su destacada trayectoria profesional, institucional, científica y académica. “Su invaluable aporte ha elevado significativamente el compromiso de la profesión médica con la salud de los colombianos”, afirmó el doctor Stevenson Marulanda.
Para los miembros de la ASOMEB y del Colegio Médico de Colombia, es un gran honor reconocer a un hombre cuyas contribuciones a la medicina, la academia y la sociedad han dejado una huella indeleble en nuestra comunidad, continuó diciendo el doctor Madero Cervera, quien es médico cirujano, especialista en ginecología y obstetricia, especialista en reproducción humana, en biología de la reproducción humana; MSc. en bioética y profesor universitario.
La trayectoria del doctor Malabet en la medicina comenzó con sus estudios de ginecología y obstetricia, un campo que se convertiría en su pasión de toda la vida, recordó el doctor Madero. “Al completar su educación, regresó a sus raíces en Barranquilla, donde se embarcó en una carrera académica que daría forma a la vida de innumerables estudiantes y a excelentes profesionales. Desde el principio, el doctor Malabet demostró cualidades excepcionales como maestro y mentor, inspirando a sus estudiantes con su conocimiento, compasión y dedicación a la profesión médica”, agregó.
Su compromiso con la educación no pasó desapercibido y pronto fue nombrado director del programa de medicina de la Universidad del Norte. Bajo su liderazgo, el programa floreció y más tarde fue nombrado decano de la Facultad de Medicina. En palabras del doctor Madero, la visión y determinación del doctor Malabet fueron fundamentales para lograr la acreditación de alta calidad para el programa de medicina en 2000, un hito que no solo elevó el estatus de la universidad a nivel nacional, sino que también obtuvo reconocimiento internacional. Este logro fue un testimonio de su inquebrantable dedicación a la excelencia académica y su creencia en el poder transformador de la educación.
La influencia del doctor Malabet se extendió más allá de los muros de la universidad. Se convirtió en parte integral de la Asociación Colombiana de Facultades de Medicina (ASCOFAME), donde se desempeñó como presidente de su junta directiva durante dos años. Su liderazgo en esta estimada organización solidificó aún más su compromiso con el avance de la educación médica en Colombia. Comprendió la importancia de la colaboración y el conocimiento compartido entre las instituciones médicas, y trabajó incansablemente para fomentar un entorno de apoyo mutuo y crecimiento.
Para Madero, una de las contribuciones más significativas del doctor Malabet a la Universidad del Norte fue su defensa del establecimiento de un hospital universitario. “Reconociendo la necesidad crítica de contar con una instalación dedicada a apoyar la formación y capacitación de futuros profesionales de la salud, encabezó el proyecto que finalmente conduciría a la construcción del hospital universitario. Esta iniciativa recibió el apoyo entusiasta de la junta directiva de la universidad y desde entonces se ha convertido en un recurso vital tanto para estudiantes de pregrado como de posgrado, brindándoles experiencia práctica en un entorno clínico del mundo real”, dijo.
Además de sus logros académicos, el homenajeado doctor Malabet se ha distinguido como un ginecólogo con una ética y un humanismo excepcional. Su excelencia profesional, respeto por los pacientes y compromiso inquebrantable con la salud y el bienestar de las mujeres han establecido un estándar para sus colegas. “El doctor Malabet encarna los principios de ética profesional, compasión y dedicación, y sirve como modelo a seguir para todos los que aspiran a ejercer la medicina”, comentó el doctor Madero.
“Hoy, mientras celebramos los notables logros del Dr. Malabet, es con gran orgullo que le entregamos la Medalla a la Excelencia Académica “Doctor José Félix Patiño”. Este prestigioso premio es un reconocimiento a su destacada carrera académica y profesional, un tributo a su dedicación, pasión y compromiso con los campos de la medicina, la academia y la comunidad. Simboliza el profundo impacto que ha tenido en las vidas de sus estudiantes, pacientes y la sociedad en general. Al honrar al doctor Malabet, también reflexionamos sobre los valores que encarna: liderazgo, visión, generosidad y la capacidad de inspirar y motivar a otros. Su legado, sin duda, resonará en varias generaciones de médicos y académicos, y servirá como un faro para quienes vienen tras de sus pasos”, expresó
Al concluir, el doctor Madero extendió las felicitaciones al doctor Carlos Malabet diciendo: “su trabajo y dedicación no solo son encomiables, sino que también sirven como ejemplo para todos nosotros en la profesión médica. Al celebrar el Día Panamericano del Médico, reafirmemos nuestro compromiso con la excelencia en la medicina y honremos las contribuciones de quienes han allanado el camino para futuros avances en la atención médica. Gracias, doctor Malabet, por su compromiso inquebrantable con la medicina, la educación y el bienestar de nuestra comunidad. Su legado es de inspiración y estamos agradecidos por el profundo impacto que ha tenido en la vida de tantas personas”, finalizó el doctor Madero.
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