Por. Dr. Manuel Latorre
Durante seis años de formación médica profesional, las instituciones educativas enseñan a los médicos en formación a tomar decisiones basados solo en el conocimiento y criterio profesional, porque como futuros galenos deben ser autónomos y resolutivos ante los retos que les impone cada paciente.
Debido a la medicina basada en la evidencia, impuesta en el nuevo milenio, los médicos en formación deben basarse en clases, libros, guías, protocolos, sesiones de discusión, prácticas docente-estudiantiles y turnos académicos-asistenciales, con el fin de tomar la mejor decisión para que sea asignada muy posiblemente una buena calificación y de antemano responder adecuadamente a los pacientes.
Pero durante la vida estudiantil se evidencia como los tutores se enfrentan a un sistema donde prevalece la medicina gerencial, que prioriza los gastos y se enfoca en conservar los recursos de un sistema poco eficiente, quedando al final el bienestar de los usuarios.
Son diversas profesiones las que juzgan y controlan el actuar médico y la forma como se ofrece el tratamiento a las diferentes patologías, fomentando la utilización de guías clínicas y manuales de medicina basada en la evidencia como criterio único e irrefutable de proceder.
Se atienden enfermedades, no al paciente, ya que se olvida la individualidad y la integridad.
Hace poco el Estado mediante la Ley Estatutaria defendió la autonomía médica para garantizar la protección de la salud de los colombianos.
Es una autonomía regulada en la ética, la racionalidad y la evidencia científica que apoyan los estudiantes.
La pregunta es por qué una vez firmada la Ley se sigue vulnerando la facultad de los médicos para proceder y garantizar la mejor atención a cada paciente.
Invitamos a los futuros y actuales médicos a ser agentes del cambio. Debemos exigir respeto por la profesión y el criterio médico que persiga el bienestar de los colombianos y no otros intereses.
Desde ACOME invitamos a todos los estudiantes de medicina a seguir el proceso de formación y capacitación para superar las limitaciones del sistema y actuar con el mejor juicio en beneficio de los colombianos.
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