Las facultades de medicina deben instaurar programas de formación de docentes, que tengan en cuenta a los colegas trabajadores de las instituciones prestadoras que reciben personal en formación.
Por Jorge Diego Acosta Correa – Asesor de presidencia del Colegio Médico Colombiano
En los múltiples mensajes de los colegas en las redes, se han ido decantando propuestas para la resolución progresiva y la erradicación del maltrato, la sobrecarga y el acoso en los procesos de formación médica y particularmente para las especialidades. Paso a mencionar las que he encontrado:
1. El cumplimiento de la normatividad actual, especialmente de la ley de residentes, sería un gran avance.
2. Debemos constituir líneas de atención urgente, 24/7 a nuestros internos y residentes o colegas en riesgo de depresión, trastornos de ansiedad, síndrome del quemado, o de cualquier afectación mental, comportamental o a víctimas de acoso o maltrato con siquiatras, sicólogos, líderes gremiales y abogados de consulta. Ya una sociedad científica la tiene para sus asociados. Para financiarlas y operarlas debe darse concurrencia.
3. Las facultades de medicina deben instaurar programas de formación de docentes, que tengan en cuenta a los colegas trabajadores de las instituciones prestadoras que reciben personal en formación.
4. En los mecanismos de selección para la admisión a los programas de formación, deben claramente definirse los perfiles apropiados para cada especialidad o para el ejercicio como médico general e informar las características y las exigencias propias de cada programa.
5. Igualmente, para la selección de docentes, no basta con tener los conocimientos, habilidades y competencias requeridas para el buen ejercicio, sino que además se requiere un buen perfil y capacitación específica en enseñanza del arte a adultos pares.
6. Deben eliminarse las entrevistas para la admisión a los diferentes programas, fuente de roscas, inequidades y clasismo.
7. Debe establecerse el examen único nacional para el ingreso a residencias y la prueba teórico- práctica postitulación profesional y de especialistas que vayan a ejercer en el país. Así, ingresan a las especialidades los mejores médicos generales y se eleva la calidad de todos los graduados, incluyendo a los que vienen del extranjero.
8. Por justicia, equidad y necesidades del desarrollo, ampliar y extender a todo el territorio la educación pública superior en salud, gratuita y de alta calidad, a partir del establecimiento de sedes regionales de las facultades de universidades públicas existentes.
9. Todos y cada uno de nosotros, presentes en todos los ambientes donde llegan los estudiantes, internos y residentes, podemos ser los agentes del cambio cultural que se requiere. Agentes y veedores de la formación de los futuros colegas, con altos estándares de exigencia en calidad técnica y humana.
10. Sin maltrato, acoso, sobrecarga inútil y hostilidad. Conscientes de que la mejor autoridad y la más alta eficacia de la labor docente, están dadas por el maestro modelo que anima a sus alumnos y por el ambiente humano y satisfactorio que todos podemos construir en los sitios de trabajo y docencia.
[Me tomé la licencia de redactar las propuestas que encontré como tales, o implícitas en comentarios. Queda abierta la puerta a cambios, ampliaciones o precisiones y la invitación a pasar del discurso a la acción].
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