Anestesia no es solo el quirófano. Es saber dar información y comunicar malas noticias en Críticos, es orientar en Consulta de Preanestesia y CMA y escuchar y calmar en Terapeútica del dolor, tanto agudo como crónico. Es poner una sonrisa en la cara por mucho que te joda la epidural de madrugada.
A pesar de que el blog“ La doctora Jomeini” lleva un año cerrado, me siguen llegando cartas de residentes y adjuntos de Anestesia de todas partes del mundo. Hace poco me llegó un mail de un R1 al que llamaremos Mateo. Mateo me decía que había elegido Anestesia porque le parecía una especialidad muy completa, una general con Cardio, Neumo, Nefro, manejo de las quirúrgicas y muchas técnicas, pero que echaba una cosa en falta: el contacto con el paciente.
Después del MIR, cuando barajaba posibilidades, vi un vídeo de la CTO en el que uno de los tutores decía que lo bueno de Anestesia era que tenías poco contacto con el paciente. Recuerdo que pensé, entonces, que para eso era mejor escoger una especialidad de laboratorio.
En un curso de ecografía al que fui, el profesor -un eminente anestesiólogo- no se dirigió al paciente que estaba pinchando ni una sola vez y lo desnudó, sin contemplaciones y sin decirle una palabra, delante del grupo de alumnos. Para mí, en ese momento, dejó de ser alguien de quien aprender.
Os pongo estos ejemplos, porque, desgraciadamente, la empatía no es una asignatura de la carrera de Medicina. Para ser médico, te obligan a meterte entre pecho y espalda tochos infumables de datos y más datos, pero nadie te examina de humanidad. Incluso, hay compañeros que me han dicho que la empatía está sobrevalorada.
Señores anestesiólogos, no somos Millers andantes. Somos médicos. Y el contacto con el paciente es fundamental. Si te presentas al inicio de la cirugía, con una sonrisa. Le cuentas al paciente lo que va a pasar y charlas con él, entrará mucho más tranquilo, con lo que necesitará menos fármacos para dormirse y su despertar será mucho mejor.
Y no solo eso: Anestesia no es solo el quirófano. Es saber dar información y comunicar malas noticias en Críticos, es orientar en Consulta de Preanestesia y CMA y escuchar y calmar en Terapeútica del dolor, tanto agudo como crónico. Es poner una sonrisa en la cara por mucho que te joda la epidural de madrugada.
Lo que diariamente pasa por tus manos son personas. No lo olvides. Ponte en su lugar y sé humano. Eso es lo único en lo que las máquinas no podrán sustituirnos jamás.
Fuente: https://anestesiar.org/2015/la-humanidad-del-anestesiologo/
Deja un comentario